domingo, 22 de noviembre de 2020

Crónica Cinéfila: ¿por qué dejé de ver trailers?


Hace unos años, un amigo comentó que a él no le gustaba ver trailers de películas. Me lo encontré muy extraño porque uno de los mejores elementos de mercadeo de una película es el mismísimo trailer, pero él explicaba que simplemente ya no le llamaba la atención verlos porque siempre delataban la película.

De repente me encontré en una situación similar, donde yo saqué un twist muy específico del final debido a lo que el trailer mostró. Para sorpresa de muchos tenía razón: el personaje estaba muerto y la chica alucinaba con él (no diré el título por si hay personas que no la han visto). Tres de mis amigas no entendían cómo llegué ahí con solo mirar el trailer, hasta que les hice un breakdown de este y se dieron cuenta también. Quizás es porque lo vi tanto que me di cuenta o simplemente estaba ahí mismo y no había que deducir mucho. Pero simplemente llegué a la misma conclusión que mi amigo: dejé de ver trailers. 

Mis razones son más puntuales, aunque creo que todo cinéfilo que llega a esta decisión lo hace casi por lo mismo. 

Lo primero es el hecho de que un trailer ahora le quita el elemento sorpresa de la temática o el conflicto de la historia. Antes las películas de terror se abstenían de mostrar aspectos del antagonista que atacará en pantalla, por el mismo hecho de que al revelarlo ya están avisándole a la audiencia que eso es lo que deben encontrar. Pero no solo ocurre con este género; hasta los dramas más indies en los que su temática es su elemento más fuerte son víctimas de la exposición en un trailer mal estructurado.

Después está el tema de contar la historia completa en 2 minutos. Se supone que un trailer es la recopilación de un límite de escenas con el fin de venderle visualmente el producto a una audiencia meta. Pero vender el trailer no debe ser vender la película en 2 minutos (o más... porque ahora también está la popularidad de tener trailers larguísimos lo cual NO debería ser así). Hay algunos que una vez los ves no solo sabes lo que ocurrirá al final, sino que también sabes todo lo que ocurrirá en el centro. Uno de los mejores trailers que he visto es el de la película Roma por la sencilla razón de que nunca se llega a tocar el enfoque de la película. Pero eso se debe a que Alfonso Cuarón es un genio y cuida mucho su material.

Con esto no digo que los trailers deben ser completamente abstractos, pero la prudencia de elegir escenas específicas y que con esto no se sienta que se delata los momentos más esenciales es muy importante. Recordemos que también se quieren vender taquillas del cine o que se subscriban a la página de streaming a verlo.

Mi última razón es muy crítica y personal. Se trata de vender la idea erronea a la audiencia. No se imaginan la cantidad de veces que veía un trailer y decía "esta película de terror estará buenísima", y resultaba que no era terror, o que me indicaba que la historia se enfocaría más en un personaje o un tipo de historia, y al final no era así. La decepción era tan grande que en más de una ocasión sentí la necesidad de salir de la sala de cine. Quiero creer que los publicistas utilizan esta técnica para llamar a más personas de otro tipo de público a ver la película; pero y ¿qué nos dejan a quienes somos de ese público, que somos engañados y después acribillamos la película con palabras crueles por la gran decepción que nos han dejado? No piensen que seré bondadosa porque ustedes inocentemente quisieron vendérmela con lo que a mi me gusta ver para luego no ser así. No lo seré.

Ver trailers es uno de los trabajos más importantes de todo cinéfilo. Se hace para poder predecir qué tan interesante o desastrosa será una película o serie. Pero definitivamente se ha salido de mi sistema de trabajo. Con la simple lectura de una sinopsis o el poster, ya es suficiente para mí. Y con esto no les digo que no vean trailers, pero tengan cuidado con ellos. No vaya a ser que un día por una simple mala estructura, les digan el twist del final.

Pero si ya los dejaste de ver, ¿por qué lo hiciste?

No hay comentarios.:

Publicar un comentario