sábado, 22 de febrero de 2020

Crónicas de California: ¿Qué no hacer cuando eres productor?


Si hace 6 años me hubiesen dicho que la mayoría de mis créditos serían como productora, nunca se lo hubiese creído a nadie. Aunque es una posición que trae muchos méritos y que le da mucho control a quién lo maneja, es a la vez la posición que muchos odian, no solo por las funciones, sino por la persona en que te conviertes.

Los deseos de muerte que muchas personas dentro de un rodaje sienten hacia el productor se deben a muchas razones; la principal es que, por ser una posición que requiere tanta atención y cuidado, su trato hacia otros termina siendo... indeseable. Y no es mentira que nos pasa a todos: a ley de días de rodaje, y tantas personas dependiendo de ti, lo importante no es ser amigable, sino que todo quede como ha sido planeado. Sin embargo, hay una gran diferencia entre perfeccionista diablito andante. Por eso, en base a mis experiencias y lo que he notado de los productores en Hollywood para los que he trabajado, he aquí 5 lecciones de qué no hacer cuando eres productor.

1. No delegar. Mientras producía el teaser de Exorcism 101, habían pasos que me los sabía tan de memoria o los había hecho tantas veces en otras ocasiones, que cuando lo hacía, mi propio equipo me decía: "pero... eso le corresponde a fulanito". Y era verdad, me molestaba delegarle algo a alguien porque entendía que yo lo podía hacer mejor o porque no se lo quería confiar a nadie. Entiende que el productor toma el rumbo del asunto, pero al final del día ningún bote anda en solitario. Además, si le estás pagando a un equipo, usa de él.

2. Abusar del rol. Ahora viene la contraparte de lo anterior. Uno de mis antiguos jefes trabajaba como encargado de producción del proyecto para una serie web. Trabajamos tantas horas de corrido juntos que llegó a un punto en que me contrató como su asistente porque le gustaba cómo manejaba la agenda y la lista de trabajos. Sin embargo, comenzó a incluir tareas que no correspondían, como limpiar el reguero de su oficina o devolver paquetes personales a tiendas; me sentía como la chacha. Recuerda que tus "empleados" tienen cargos específicos, e independientemente que sean tus asistentes, tienes que recordar que no son tus chachas(os).

3. Creerse el centro del universo. Hace un año me contrataron como asistente de producción para una productora mayor de 70 años. La mujer casi nunca me hablaba de trabajo, siempre quería hablar de su vida personal, cosas que quería que le ayudara a hacer o, peor, adivinar lo siguiente que iba a pensar para así hacer lo que ella quería tal y cómo lo quería. Como productora, puedes requerir ciertas necesidades de parte de tu equipo, pero aunque eres Dios en la producción, no lo eres en la vida real. Respeta a tus empleados y trátalos con dignidad, recuerda que ellos también son humanos y que aunque estén trabajando para ti, no quiere decir que son psíquicos y que sabrán lo que estás pensando.

4. Pensar que eres el único que sabe o que tiene buenas ideas. Este es un error constante de una persona muy cercana a mi (y seguro si lo lee, me escribirá): aunque eres la cabeza de la producción, ya por eso no te convertiste en la única persona que procesa y ejecuta dentro de una producción. Esa persona de la que hablo hasta le molesta cuando otros dan sugerencias. Entiendo perfectamente que cuando la agenda va apretada, es difícil aventurarse a ideas de todos, sin embargo (y lo repito como una guagua de frutas andante), una producción se hace con un equipo de personas, y a la hora de resolver problemas, a veces es bueno tener varias ideas de cómo hacerlo.

5. Tratar todas las producciones de la misma manera. Mi jefe actual tiene 40 años trabajando para la industria de cine. Ha estado en más de 25 producciones, incluyendo Total Recall, Pulp Fiction y Speed. Sin embargo, constantemente me dice de resolver situaciones de producción de maneras que ya no son efectivas, y se molesta cuando le explico que eso no aplica para el formato en que trabajamos ahora, pues dice que "a estas alturas, él no está para estar aprendiendo cosas nuevas dentro de producciones que ya ha hecho anteriormente". Les informo que el cine es un arte y cambia dependiendo de lo que vayas a hacer; cada producción tiene una estructura diferente. No quieras aplicar lo mismo que hizo el ganador al Oscar con sus películas, porque esa fórmula no le va a funcionar ni siquiera a él en todas sus historias. Aprende a comenzar de cero en cada etapa.

Finalmente, recuerda que nadie trabaja para ti día completo a menos que pagues ese precio. Nadie es tu esclavo ni mucho menos están supuestos a cumplir tus "necesidades personales". Me molesta cuando escucho productores discutiendo sin ninguna razón o riéndose de su equipo poor decisiones que tomen durante el rodaje. Recuerda que, así como tú no recomiendas a personal que no hizo su trabajo, así el personal habla de ti cuando otros aplican a trabajar contigo.

No te quieras convertir en el indeseable de gratis: no vale la pena. Ni aunque te ganes con eso 25 créditos en producción. 


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